Curso de Peluquería Canina: visita al peluquero canino cada tres meses

El perro debería visitar la peluquería canina como mucho cada tres meses para ser arreglado el pelaje. Así, los trabajos se pueden realizar con más calma, los perros están más habituados y acudir a la peluquería no se convierte en un proceso traumático.

También es menos agresivo para su piel y se evitan posibles patologías cutáneas que pueden acarrear problemas. La visita regular al peluquero canino ayuda a detectar de forma precoz cualquier anomalía en la piel, parásitos, alergias, etc. que pueden convertirse en un problema para nuestro perro. Con la formación en peluquería canina de ISED estarás preparado para detectar todos estos problemas y recomendar el mejor tratamiento o, en caso de ser una enfermedad mayor, la visita a un veterinario.

La tenencia responsable de mascotas incluye la higiene, pero esta va más allá de duchar a nuestras mascotas en casa; es también mantener un corte de pelo acorde con sus características anatómicas, según sus necesidades y actividad. Además, visitar al peluquero canino como máximo cada tres meses permite conseguir arreglos con más gracias y estética, que también transmiten bienestar y cuidado del animal.

Rasurar bien al perro para que esté más tiempo sin pisar la peluquería es un gran error y es tarea del peluquero canino hacer entender este hecho a los clientes. En época de crisis un gran clásico es solicitar que el animal quede bien rasurado para prolongar al máximo la próxima visita al peluquero canino. Pero si se pide que se rasure el manto a una longitud no superior a los 2 mm, lo único que conseguiremos es que la piel del perro quede a la merced de las inclemencias del tiempo, provocando quemaduras, resecamientos o alteraciones en el equilibrio natural de la dermis, a parte que estéticamente pierden volumen y gracia. El curso de Peluquería y Estética Canina te permitirá conocer el corte más adecuado a cada raza y aconsejar al cliente para que sus mascotas estén en las mejores condiciones.