Es posible que estés planteándote mudarte o comprar una casa. En ese caso, seguro que te interesa saber cuáles son los gastos de vivienda a los que tendrás que hacer frente para acometer la operación. Aquí queremos explicarte todo lo que debes saber al respecto.
¿Cuáles son los gastos que debe pagar el comprador y el vendedor?
En primer lugar, vamos a hablar de los gastos que genera la vivienda durante el proceso de compra y venta. Vamos a dividirlos en dos secciones. Empezamos comentando aquellos a los que tiene que hacer frente el comprador:
- La escritura pública. Conlleva el pago de uso aranceles de entre el 0,2 % y el 0,5 % del valor de venta del inmueble.
- La escritura del banco. Solo necesaria en caso de que la vivienda vaya a ser comprada mediante hipoteca. Tiene el mismo precio que la anterior.
- La inscripción en el Registro de la Propiedad. La operación de compra y venta debe ser reflejada en él. Cuesta entre un 0,1 % y un 0,25 % del precio de la casa.
- Honorarios del notario. Están regulados por ley. Sin embargo, los notarios tienen la potestad de hacer rebajas o incrementos del 10 % respecto a ellos.
- Otros. Más allá de estos, el comprador puede tener que abonar el importe de los servicios financieros que tramiten la hipoteca. Asimismo, de su cuenta correrá la tasación del inmueble.
En total, los gastos de la vivienda que corresponden al comprador ascenderán a entre un 10 % y un 12 % de su valor de venta. Sin embargo, el vendedor también tendrá que pagar. A él corresponden, en este sentido, los gastos de intermediación (inmobiliaria), salvo que haya un pacto por el que se haga cargo el comprador.
¿Cuáles son los impuestos que se deben pagar?
El comprador, para poder adquirir la vivienda, debe hacer frente a las siguientes cargas impositivas:
- El ITP (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales). Solo en caso de que se trate de una vivienda de segunda mano. Su valor oscila entre el 3,5 % y el 8 % del valor del inmueble. Su cuantía lo fijan las comunidades autónomas de forma independiente.
- El IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido). Solo en caso de que sea una vivienda de nueva construcción o gran rehabilitación. Tiene un precio fijo del 10 % del valor del inmueble. Aunque, si la casa está sujeta a algún tipo de protección estatal, su valor será del 4 %.
Hasta hace poco, el comprador también asumía el coste del IAJD (Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados), pero ahora es obligación del banco que concede la hipoteca. Por su parte, al sujeto que vende le corresponde pagar:
- El IIVTNU (Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana). Más conocido como plusvalía municipal. Lo fija cada ayuntamiento y solo se paga si procede.
- Cualquier otra carga. La vivienda debe venderse libre de cargas. Al vendedor le corresponderá la liquidación de la hipoteca, de posibles deudas que la tengan como aval y del IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles) del año en el que se produce la venta.
Consecuencias de incumplimiento de pagos
La firma del contrato de compra y venta ante notario, así como la escrituración pública de la vivienda, no se puede realizar sin haber abonado el importe de estas cargas impositivas. La única excepción es el IIVTNU, que se paga a posteriori si procede. No cumplir con su abono en plazo supone sanciones de hasta el 20 % de su valor.
Otros gastos al adquirir la vivienda
Una vez adquirida la vivienda, el comprador debe hacerse cargo de todos los gastos asociados a ella. Hablamos, por ejemplo:
- Del IBI.
- Cuotas de la comunidad de propietarios.
- Derramas.
- Facturas de agua, gas y luz.
- Etc.
En definitiva, esperamos haberte ayudado a comprender correctamente cuáles son los gastos de una vivienda derivados de su compra y venta.
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